El Seremi de Minería Roberto Vega se refirió a la situación de la huelga de trabajadores de Minera Teck Carmen de Andacollo asegurando al Diario La Región que «Tanto la minera Teck Carmen como el sindicato llevan una huelga que es legal y está acercándose, si es que ya no la pasamos, a la huelga más larga en la historia de la minería, que fue en la Escondida, con 43 días en 2017», cuenta.
Por un lado, dice, está la empresa minera, «que está pasando como todo saben por la coyuntura internacional del precio del cobre y donde las condiciones económicas no son las mejores, pero sí tienen que hacer un esfuerzo para poder acercar las posiciones y, por el otro lado, está el sindicato ejerciendo su legítimo derecho a la negociación colectiva y la huelga como una medida de presión…».
Afirma que «el 24 de octubre le solicité al director de la Inspección del Trabajo y también a la gerencia general de Teck para que se hagan los mayores esfuerzos, y si hoy la gente está pidiendo reformas estructurales a las pensiones, mejoras en la salud y reformas en la educación, en el caso de Teck pasa lo mismo, debido a que los trabajadores lo que están pidiendo es una mejora en sus condiciones del sueldo base, el bono de término de conflicto que es algo legal y una serie de incentivos de tipo funcional».
Sin embargo, la autoridad lamenta el largo periodo que lleva la movilización, «puesto que es un deterioro tanto para la empresa, los trabajadores y sus familias. Estamos poniendo los mayores esfuerzos para que esto se solucione, y entiendo que ayer (lunes) los trabajadores fueron a la embajada de Canadá a entregar una carta, también se reunieron con los ejecutivos de la minera e iban a entregar otra carta al ministerio de Minería, entonces acá quiero ser claro respecto a lo que dijo el diputado Núñez, pues el gobierno jamás se ha negado a recibir a los trabajadores, y tanto es así que el viernes subí a hablar con ellos sin tener ningún tipo de problemas».
Reconoce que como gobierno «no podemos presionar ni a uno ni al otro», pero que sí hay que acercar y saber «cuáles son las necesidades y legítimas expectativas de ambas partes, que es generar trabajo. Acá los trabajadores quieren volver a su trabajo en mejores condiciones a las que tenían al inicio de la huelga».
La minera cuenta con 478 trabajadores, cerca de 190 corresponden a supervisores y alrededor de 600 son quienes trabajan con los contratistas, sumando casi 1.200 trabajadores, «así que lo grave es que el extender un conflicto como una huelga más allá de los periodos normales, necesariamente llevará un ajuste, y ese ajuste finalmente lo terminarán pagando las otras 600 personas que no forman parte del sindicato, puesto que indirectamente son los más perjudicados, dado que no tienen mucha intermediación en lo que es la negociación, que es entre empresa y sindicato».
Quienes han sentido enormemente este paro de actividades son los habitantes de Andacollo, y eso bien lo sabe el seremi, quien sentenció que esta huelga «ha tenido un impacto enorme en la economía de Andacollo, puesto que hay muchos pequeños locales que han sufrido, porque todo saben que esta no es una ciudad que se caracteriza por tener un comercio de grandes tiendas, por tanto han sentido directamente lo que es el impacto del paro».
(Fuente Diario La Región)